Con ROBERTO S. en Oviedo 2018

       Poco a poco se nos fue complicando el curso, hasta el punto en que tuvimos que sacar nuestro "plan B", que sirvió, buscando la parte positiva, para entrenar un poco más apretados de lo esperado, o deseado, y con una interacción entre practicantes más cuidada, entre otras cosas, para no caerle a nadie encima. Un buen trabajo físico y mental para la práctica de este arte marcial.

    Y que decir, si además de los compañeros Asturianos se nos unieron Astur/Gaditanos, Galego/Asturianos,  Gallegos/Galegos, Cántabros, Japoñoles, Astur/Madrileños, Madrileños a seca y demás Astures que lo son sin saberlo; pues que además pudimos disfrutar de la grata compañía con un recientemente reconocido  6º dan como es el Leones/Astur Ángel L. Martinez, que quiso acompañarnos con alguno de sus alumnos, Leoneses también a secas, creo, menudo lío... ¡Que me perdonen los no mencionados! y ya salgo de este jardín en el que yo sólo me metí.
     

    Pero si a alguien hay que felicitar y agradecer la visita es a Roberto Sánchez, que a pesar de los inconvenientes de una visita tan rápida y el cansancio del madrugón, se centró plenamente en las cinco horas que duro el curso, supo controlar plenamente los tiempos para que pudiéramos experimentar y disfrutar tanto de momentos relajados como de momentos llenos de intensidad e implicación, dejándonos mucho trabajo técnico para tratar de profundizar en una clara línea de trabajo hasta el próximo encuentro, en que intentaremos mostrarle que de su esfuerzo van saliendo algunos frutos.

    Y ya sabéis, lo que se hace en las cenas, queda en las cenas... ¿o no?